INTIMIDAD

Palabras a golpes de fuego.
Sensaciones que explotan por emerger.
Opresión en el pecho por sentir.
Lo bueno y lo malo de ser yo.

lunes, 14 de abril de 2008

Orgasmo gastronómico



Hay quien dice que para ser feliz hay que "colocarse" con algo...
Hay quien se desinhibe a base de alcohol..
Hay quien no encuentra placer ni en el propio placer.
Pero yo no pienso así.
Y hoy (como otros muchos días de modos muy diferente) he tenido ocasión de comprobarlo. Sentirlo y vivirlo. Ser feliz, desinhibirme y disfrutar del placer con algo tan sencillo como con una comida. Y claro, con una buena compañía.
Mi amiga (mi hermana del alma) me invitaba hoy a comer en un lugar nuevo, un restaurante que habían abierto hace poco en un pueblo al lado del suyo.
Un vegetariano.
Ayer reservó mesa y hoy, al llegar a eso de las dos de la tarde, nos dejaban escoger donde sentarnos, pues no había llegado todavía mucha gente. Había una mesita redonda, en un rincón, que nos ha ofrecido y hemos aceptado encantadas.
Un vela dentro de una lámpara de sal.
Una buena música; primero música indú; después un jazz suave y melódico.
La carta: (casi) todos los productos que en ella figuraban tenían la calificación de bio (biológicos). Incluyendo la bebida, los postres, todo...
Nos ha costado decidirnos, pues todo nos parecía apetitoso.. al final, primer plano para mi amiga: ensalada de frutos secos (ummmmmm); para mí: cazuelita de patatas con variedad de salsas. Cuando leí cazuelita pensé que sería pequeña... Si, sí.. pequeña... Un primer plato que parecía un segundo. Patatas a dados, con su piel, asadas en el horno rústico que tienen a la vista, acompañadas de una serie de salsas, a cual más rica, y un punto de ensalada variada en un lateral.
Para beber: cerveza negra (bio).
Segundos platos: para ella: pastel de verduras. Para mí: wok de verduras con arroz basmati aromatizado.
Postres: un browni de chocolate (por supuesto, hecho de harinas integrales y chocolate negro sin azucar refinada) y hojaldre con crema y frutas frescas (recien cortadas y colocadas en la mezcla) para mí.
Acabar con un "chai".
Bueno, todo ha sido un auténtico placer. Cada mordisco que le dábamos a la comida de cada plato, eran unas risas de gusto, de satisfacción, de plenitud y felicidad. El lugar nos acompañaba. Nosotras disfrutábamos de la compañía, del paladar, de la atención de la camarera (profesionalidad más transmisión de serenidad y saber hacer), respeto por parte de todos los comensales en el comedor para mantener las conversaciones en un tono de voz apropiado (sin invadir las conversaciones ajenas).
Ha sido maravilloso!!
Al salir de allí íbamos las dos como ébrias de satisfacción, con la "panza" llena, con la paz del lugar, la luz del sol de media tarde en un día claro, con la alegría de compartir unas sensaciones tan gratas.
Dar un paseo, estirar las piernas, bajar la comida y compartir ha sido el punto final y el toque de gracia a un orgasmo gastronómico en buena compañía (la mejor).


2 comentarios:

Anónimo dijo...

no sé por que...pero.....a medida que te iba leyendo, iba pensando...de qué me sonará a mi todo esto?..................y la verdad es que me suena y mucho, tanto, tanto....como si la que hubiese estado ese día a tu lado, hubiese sido yo?....jajaja vamos a tener que repetirlo para saber que no fué un sueño...jejejeje********************************************************************************************te he dejado un premio en mi humilde hogar...un beso desde el alma cariño....


Firma:lamasbruja jejeje

JuanMa dijo...

¡Qué envidia me ha dado leerte!

Como dices, hay muchos placeres en la vida...

Un beso enorme para las dos (Bio, claro ;P).

Regalos que recibo